Si los intercambiadores de calor no alcanzan las temperaturas necesarias, puede haber problemas de calidad y eficiencia en el proceso productivo.
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Mayor eficiencia energética
Su coeficiente global de transferencia de calor es de 3 a 4 veces mayor, lo que permite aprovechar al máximo los recursos energéticos de la empresa y reducir significativamente los costos asociados con el calentamiento y enfriamiento de productos.
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Minimización de pérdidas de producto
Al mantener temperaturas estables durante el proceso, se garantiza la calidad del producto y se minimizan las pérdidas por incumplimiento o rechazo, maximizando las ganancias para la empresa.
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Menor frecuencia de mantenimiento
Estos intercambiadores requieren menos mantenimiento, lo que reduce los costos operativos y aumenta la disponibilidad de la línea de producción. Además, el mantenimiento es fácil y rápido, permitiendo recuperar al 100% la eficiencia de transferencia de calor.
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Cumplimiento de estándares de seguridad
Garantiza el cumplimiento de los estándares de seguridad alimentaria al mantener temperaturas precisas durante el proceso, brindando tranquilidad a los clientes.
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Optimización del espacio
Su diseño compacto permite una instalación eficiente, optimizando el espacio en la planta de producción y facilitando el mantenimiento. Esto también contribuye a ahorrar espacio valioso en las instalaciones.
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Bajos costos de instalación
Los costos de instalación son bajos debido a su diseño eficiente y compacto.
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Reducción de la contaminación
Facilita la limpieza y sanitización del equipo, ya sea por CIP (Cleaning In Place) o mediante limpieza mecánica y química de las placas, reduciendo la contaminación y mejorando la seguridad alimentaria.
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Flexibilidad de producción
El equipo es altamente flexible, con un amplio rango de operación, lo que permite trabajar con diferentes productos sin necesidad de modificar el equipo, siempre y cuando se respeten los caudales y temperaturas. Además, se puede incrementar su superficie de transferencia simplemente agregando placas adicionales.
Reducción de costos de producción
Ayuda a mantener la calidad del producto y minimiza las pérdidas por rechazos del mismo. Esto reduce los costos. Bajan los costos asociados con la producción de productos defectuosos o fuera de especificación.
Menor consumo de agua y vapor
los intercambiadores de calor a placas son más eficientes, que los intercambiadores convencionales, lo que redunda en una reducción en el consumo tanto de agua de enfriamiento, así como de vapor para el calentamiento de los productos.
Ideales para mantener temperaturas precisas y estables en agua, zumos, cerveza, vino, leche y otras bebidas, garantizando la calidad y seguridad del producto.